Consecuencias del aislamiento social en la salud mental

Consecuencias del aislamiento social en la salud mental

Combatir los efectos del aislamiento social en la salud mental

El aislamiento social no es necesariamente malo; la mayoría de las personas anhelan la soledad al menos de vez en cuando. Estar solo puede ser relajante, meditativo y rejuvenecedor. El aislamiento social suele referirse a la soledad no deseada y poco saludable.

Las personas socialmente aisladas pueden carecer de amigos o compañeros de trabajo cercanos, y a menudo se sienten solas o deprimidas. Pueden sufrir de baja autoestima o ansiedad. Los siguientes síntomas asociados al aislamiento social son señales de advertencia de un aislamiento social poco saludable:

El aislamiento social puede implicar el aislamiento emocional, que es una falta de voluntad o incapacidad para compartir los sentimientos con los demás. Cuando los individuos socialmente aislados carecen de interacción emocional y de apoyo, pueden volverse emocionalmente insensibles, es decir, alejados de sus propios sentimientos.

El aislamiento social es la falta objetiva de relaciones sociales o la infrecuencia del contacto social. La soledad es un sentimiento subjetivo de aislamiento. Una persona puede estar socialmente aislada pero no sentirse sola. Una persona también puede sentirse sola cuando está rodeada de gente.

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Los trastornos psicológicos más comunes que surgen son la ansiedad y el pánico, los síntomas obsesivo-compulsivos, el insomnio, los problemas digestivos, así como los síntomas depresivos y el estrés postraumático (Rogers et al., 2020). Estos no son solo una consecuencia directa de la pandemia, sino que también están impulsados en gran medida por los efectos del aislamiento social prolongado, es decir, la falta objetiva de interacciones con los demás (Leigh-Hunt et al., 2017). La revista médica

  La salud mental en los tribunales

The Lancet ha publicado recientemente un artículo del que se desprende un panorama claro y alarmante: los períodos de aislamiento, incluso de menos de 10 días, pueden tener efectos a largo plazo, con la presencia -hasta 3 años después- de síntomas psiquiátricos (Brooks et al., 2020).

Aunque sea necesario para limitar la propagación de la epidemia, de hecho, los seres humanos no están “diseñados” para gestionar la segregación durante mucho tiempo. Como nos recuerda el filósofo griego Aristóteles, el hombre es un “animal social”, incapaz de vivir aislado de los demás, ya que la ausencia de relaciones elimina las condiciones esenciales para el desarrollo de la identidad personal y el ejercicio de la razón. Aunque nuestro primer instinto sea reaccionar con rabia ante (y con) las personas que salen a la calle, es necesario adoptar una postura compasiva más universal, y reconocer que la propia naturaleza del ser humano contrasta con la situación que estamos viviendo.

El impacto del autoaislamiento y el distanciamiento social en la

Aunque un gran número de personas se ven afectadas por la pandemia, las poblaciones vulnerables requieren una atención especial. Entre ellas se encuentran: 1) los pacientes y sus familias, 2) las personas con enfermedades físicas y/o mentales preexistentes, y 3) el personal sanitario, en particular las enfermeras y los médicos que trabajan directamente con los pacientes y las poblaciones en cuarentena 1. Cabe mencionar que los pacientes con antecedentes de enfermedad mental merecen una atención especial 7, ya que la interrupción del tratamiento debido a las dificultades de seguimiento, la escasa atención especializada, el mal control de las dosis y la escasa disponibilidad de los medicamentos pueden desencadenar conductas de descuido debido al deterioro de la capacidad de juicio, lo que lleva a comportamientos de riesgo y a la dificultad para seguir las instrucciones y las normas públicas. Esto engendra el riesgo de infringir las medidas diseñadas para mantener el brote a raya 5,8.

  Carreras relacionadas con la salud mental

Dependiendo de las características del aislamiento social, muchos acontecimientos pueden resultar traumáticos 5. Un estudio realizado en Canadá tras el SARS-CoV identificó factores de estrés psicológico entre el personal sanitario, como la percepción de estar en riesgo de adquirir la infección, el impacto del brote en la vida laboral, un estado de ánimo depresivo, el hecho de trabajar en una unidad de alto riesgo, el cuidado de un solo paciente con SARS-CoV frente a muchos pacientes con la enfermedad 6. En consonancia con estos hallazgos, en trabajadores sanitarios seguidos durante un periodo de tres años en China, se encontró que el 10% experimentaba altos niveles de síntomas atribuibles al TEPT 16, y aquellos que habían estado en cuarentena, los que habían trabajado con pacientes con SARS-CoV en sus turnos, y los que tenían amigos o familiares que habían adquirido la enfermedad tenían una probabilidad 2-3 veces mayor de tener síntomas de TEPT, en comparación con los que no habían tenido esas exposiciones 16. Además, seguían teniendo síntomas en 2006: cerca del 40% de la muestra seguía teniendo síntomas de TEPT 16. Un estudio francés mostró el impacto en los supervivientes de un brote pandémico en los pacientes que requirieron ingreso en la unidad de cuidados intensivos como consecuencia de la infección por el virus H1N1, el 40% de los cuales desarrollaron TEPT 17.

Efectos del aislamiento social en la salud mental

Lo más importante es que estas severas restricciones se aplicaron de manera uniforme en todo el país, independientemente de la propagación local del contagio (alta o baja). Por ejemplo, mientras que en la región de Lombardía, la propagación de la infección fue muy alta, con cerca del 40% de todos los casos positivos italianos registrados en marzo de 2020; en la región de Calabria, fue casi inexistente, representando sólo el 0,6% de todos los casos positivos (Dipartimento della Protezione Civile, 2020). A pesar de ello, las características del primer bloqueo en términos de aislamiento social fueron uniformes en todo el territorio nacional.

  Testimonios de salud mental

El primer lockdown italiano se produjo entre el 9 de marzo y el 3 de mayo de 2020, ofreciendo la posibilidad de explorar si los efectos de la desconexión social en la salud mental pueden producirse incluso durante períodos relativamente cortos. Además, el bloqueo permitió la investigación empírica de los efectos de las siguientes condiciones objetivas en la población general: la duración del periodo de aislamiento social y el posible efecto moderador de la gravedad local de la pandemia.

Elena Fornals

Bienvenidos a este espacio digital donde podrás disfrutar de información relacionada con la Psicología Holística. Mi nombre Elena Fornals profesional y con mucha experiencia en esta área que comparte con vosotros los mejores consejos para entender sobre la vida.

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