
Lenguaje corporal
Contenidos
Los artículos de Verywell Mind son revisados por médicos certificados y profesionales de la salud mental. Los revisores médicos confirman que el contenido es exhaustivo y preciso, y que refleja las últimas investigaciones basadas en la evidencia. El contenido se revisa antes de su publicación y en caso de actualizaciones sustanciales. Más información.
La psicoterapia es un término general que se utiliza para describir el proceso de tratamiento de los trastornos psicológicos y el malestar mental mediante el uso de técnicas verbales y psicológicas. Durante este proceso, un psicoterapeuta formado ayuda al cliente a abordar problemas específicos o generales, como una enfermedad mental concreta o una fuente de estrés vital.
Dependiendo del enfoque utilizado por el terapeuta, se puede utilizar una amplia gama de técnicas y estrategias. Casi todos los tipos de psicoterapia implican el desarrollo de una relación terapéutica, la comunicación y la creación de un diálogo, y el trabajo para superar los pensamientos o comportamientos problemáticos.
La psicoterapia se considera cada vez más una profesión distinta por derecho propio, pero muchos tipos de profesionales la ofrecen, como psicólogos clínicos, psiquiatras, consejeros, terapeutas matrimoniales y familiares, trabajadores sociales, consejeros de salud mental y enfermeros psiquiátricos.
Habilidades terapéuticas en el asesoramiento
Los psicólogos clínicos utilizan terapias y procedimientos psicológicos para ayudar a los clientes a superar una serie de problemas como la depresión, la adicción, la ansiedad, los comportamientos desafiantes, los trastornos neurológicos, las enfermedades mentales y los problemas de aprendizaje. Las responsabilidades típicas del trabajo incluyen:
Los requisitos de acceso a las titulaciones de psicología varían, pero normalmente se necesitan al menos 2 ó 3 niveles A o cualificaciones equivalentes, además de cinco GSCE de grado 4 (C) o superior. Se prefieren las asignaturas de ciencias. El nivel A de psicología no es necesario, pero puede darte una idea de la materia.
Deberá tener un título de grado en psicología acreditado por la Sociedad Británica de Psicología (BPS) para poder ser miembro de la BPS. También puede haber obtenido un curso de conversión acreditado por la BPS, a veces denominado título acelerado. Los cursos de conversión suelen durar un año, aunque esto puede variar, al igual que los requisitos de acceso. Después de esto, pasarás a los estudios de postgrado y a la formación, y tendrás que realizar un doctorado de tres años en psicología clínica.
Enfermería de habilidades terapéuticas
Los consejeros de hoy en día trabajan con poblaciones cada vez más diversas que tienen distintos conjuntos de necesidades. El perfeccionamiento de un sólido conjunto de habilidades esenciales hace que un profesional de la salud mental sea eficaz y exitoso.
Cuando te levantas por la mañana, ¿tienes el impulso y la energía necesarios para acompañar a las personas en sus mejores y peores momentos? ¿Puede estar plenamente presente en las historias de sus clientes, por difíciles o largas que sean? ¿Seguirás estando presente dentro de diez años?
La idea del “yo como instrumento” es fundamental para el éxito de la educación y la carrera en salud mental. A un estudiante de orientación se le enseña a sentirse bien, pensar bien y actuar bien. Al sentirse bien, un terapeuta puede relacionarse bien y empatizar con los clientes.
Pensar bien significa pensar críticamente, conceptualizar al cliente en términos teóricos y demostrar buenas habilidades académicas. Actuar bien significa conducirse al servicio del cliente, de la comunidad y del campo profesional.
Un consejero también tiene que ser capaz de escuchar “entre líneas”, por así decirlo, las cosas que no se dicen. Lo que un cliente omite en una sesión puede hablar tan claramente como lo que se comunica en voz alta.
Habilidades y técnicas de asesoramiento pdf
Antes de comenzar la psicoterapia, la mayoría de los pacientes se preguntan: “¿Me ayudará realmente este asesoramiento con mis problemas?” Las investigaciones demuestran que hay muchos factores que influyen en el éxito del tratamiento, como la gravedad del problema o problemas que se tratan, la creencia del paciente de que el asesoramiento funcionará y el nivel de habilidad del terapeuta.
Sin embargo, las investigaciones de los últimos cincuenta años han demostrado que hay un factor -más que cualquier otro- que está asociado al éxito del tratamiento: la calidad de la relación entre el terapeuta y el paciente.
En 1913, Sigmund Freud planteó la hipótesis de que la relación entre el terapeuta y el paciente era un componente clave del éxito del tratamiento. Desde entonces, la investigación ha demostrado que la calidad de esta relación (la “alianza terapéutica”, como se denomina) es el factor que más predice el éxito de la terapia.
Sorprendentemente, la calidad de la relación terapéutica parece ser fundamental para el éxito del tratamiento, independientemente del tipo de tratamiento que se estudie. Se han realizado grandes estudios sobre la terapia individual, de pareja y familiar, utilizando diversos métodos de evaluación para medir la calidad de la relación (es decir, informes del paciente o del terapeuta o calificaciones de observación). Estos estudios, que utilizaron diversos grupos de pacientes (niños y adultos, pacientes internos y externos) tratados por todo tipo de problemas (es decir, depresión, ansiedad, abuso de drogas, problemas laborales y sociales), muestran todos la importancia de la relación terapéutica en el resultado del tratamiento.